La noche de este viernes se celebra Halloween, una de las fiestas más divertidas del
año y que más sustos garantiza. Pequeños y mayores se disfrazan de los
monstruos más aterradores para disfrutar de la noche de brujas. Pero, ¿de dónde
proviene esta tradición? El término Halloween tiene su origen en «All Hallows'
Eve» que, traducido a nuestro idioma, significa «Víspera de todos los Santos».
Otras formas de referirse a esta festividad son «Samhain» o «Noche de Brujas».
Estados
Unidos es, sin duda, el país más desmesurado y curioso a la hora de celebrar
Halloween pero los orígenes de esta festividad no se encuentran al otro
lado del charco, sino que se quedan en nuestro continente, gracias a los
celtas. El nacimiento de Halloween se relaciona con la festividad celta de
Samhain, que marcaba el final de verano, la recogida de las
cosechas y el comienzo del Año nuevo celta. Los celtas creían que en la
festividad de Samhain las líneas que separaban el mundo de los vivos y el mundo
de los muertos se estrechaban hasta el punto de que ambos podían converger,
permitiendo que los espíritus pudieran llegar al plano terrenal. De hecho, los
celtas invitaban a los familiares ya fallecidos e intentaban ahuyentar
a los espíritus malignos, usando trajes y máscaras para asustarles.
Esta
festividad meramente pagana comenzó a transformase cuando el cristianismo
intentó asumirla en su calendario. Concretamente, los papas Gregorio III
(731-741) y Gregorio IV (827-844) intentaron suplantar Samhain por el
Día de Todos los Santos, que anteriormente se celebraba el 13 de mayo. No
obstante, el auge de Halloween llegaría en los siglos
venideros. A mediados del siglo XIX, desembarca en el continente
americano gracias a los numerosos inmigrantes irlandeses que llegaron
a Estados Unidos y Canadá. Allí es donde nace el Halloween que todos conocemos
a día de hoy.
¡¡¡FELIZ NOCHE DE HALLOWEEN!!!
Y COMO NOCHE MÄGICA QUE ES, NOS ENCONTRAMOS CON UNOS ALUMNOS DE 1º DE ESO TRASLADANDO UN CADÁVER...¿QUIÉN SERÁ???